El mal olor es un problema habitual entre quienes tienen un aire acondicionado. Puede ser un problema muy incómodo, pero también es bastante fácil de solucionar y, sobre todo, de evitar. Aquí te contamos todas las claves.
Si cuando enciendes el aire acondicionado, este expulsa un olor como agrio, tienes o bien un problema con el aire que absorbe tu aparato, o bien un problema de limpieza en el mismo. El origen de este mal olor no será nunca una avería, sino una falta de mantenimiento o un error de instalación.
La limpieza es clave para evitar sufrir este problema con tu aire acondicionado. Hay partes esenciales que pueden provocar mal olor, como los filtros del aire: ellos son los encargados de recoger la suciedad que se encuentra en el aire para no expulsarla a tu estancia. Si esa suciedad se acumula o se humedece, es probable que acaben generando hongos que provocarán mal olor.
De manera más ocasional, deberás comprobar que todo el interior de tu aparato está limpio. Si abres la unidad interior y no ves suciedad, y no encuentras polvo acumulado sobre la unidad exterior, estás a salvo de los malos olores.
Por último, es recomendable que durante la instalación hagas que el tubo por el que el aire expulsa la humedad vaya directamente a un desagüe. De esta manera evitarás que entre por él algún agente infectante o esté en contacto con agua estancada.
Si el problema del mal olor en tu aire acondicionado ya ha llegado a tu casa, puedes hacer una serie de comprobaciones y limpiezas tú mismo para acabar con él.
Lo primero que debes fijarte es que el aire que está usando tu aparato de aire acondicionado no está contaminado. Si absorbe aire con olor a tabaco, basura o comida, estos olores se transferirán a la estancia donde funcione el aparato. Empieza por mantener limpio el entorno del aire para evitar malos olores.
Retira los filtros y límpialos con agua y jabón, dejándolos secar al sol. Una sencilla limpieza como esta puede ser la clave para deshacerte del mal olor de tu aire acondicionado. ¡Recuerda no utilizarlo cuando no estén los filtros colocados!
En el caso de que una limpieza superficial no acabe con el mal olor, tendrás que llamar al servicio técnico para que lo desinfecten por dentro de manera profesional.
La próxima vez que dejes de usarlo durante una larga temporada, ya sea porque te vas de esa casa o porque no lo encenderás durante una estación, recuerda también encenderlo de vez en cuando. De esta manera evitas que se formen hongos en el aparato.
Un aire acondicionado sin malos olores te permite disfrutar de lo que estás buscando: una estancia agradable donde descansar.